domingo, 14 de septiembre de 2008

LA FEUCHA

Era una apacible tarde en la laguna de Chascomùs, estábamos todas como siempre, mis mejores amigas,querìamos hablar a la vez pues, después de una semana de no vernos tenìamos de todo para contarnos. Pero recuerdo muy bien a Mariela porque su cara estaba desdibujada, triste, desconsolada. Todas nos dimos cuenta que algo pasaba y, como siempre Claudia no pudo evitarlo y le preguntò. Mariela comenzó a contarnos asì…
Dicen las malas lenguas, que en la ciudad de Mardel, Marta se acuerdan de mi prima,pobre tan feucha Estabamos de vacaciones con toda mi familia en una casa en la playa , allì vivìan mis primos un poco especiales. Fuimos con Marta a pasear por la playa una tarde donde el sol calentaba la arena y decidimos andar descalzas, ella estaba muy aburrida de salir y no encontrar al amor de sus sueños, pues siempre se le repetía el mismo sueño el de un hombre atlético y hermoso que se le acercaba buscando su ayuda. Nos sentamos mirando el horizonte, el mar estaba inquieto y escuchamos, no muy lejos de allì, ruidos extraños entre los arbustos. Pronto apareció una sombra, Marta se levantò y fue hacia allì, para sorpresa nuestra se encontraba un hombre semidesnudo y en su mano sostenía un papel, no era un papel cualquiera, era una revista de deportes.Ràpidamente acudimos en su ayuda, a me olvidè contarles que este hombre era apuesto como pocos , ojos azules, su cuerpo bronceado y atlético. Poco podía decir porque estaba muy asustado. Lo llevamos a la casa toda la familia lo recibió con cautela especialmente mis primos que son bastante raros, Marta estaba embobada le ofrecía alimentos , y sus cuidados. El pobre hombre agradecido con Marta la embelezò con sus palabras y sacando provecho de ello pudo quedarse un tiempo allì, hasta que todo pasò. Que pasò que el había escapado de la cárcel de Batàn y lo buscaban por haber robado un puesto de diarios.
Mi pobre prima Marta quedo sola y triste, soñando con aquel musculoso hombre que además de ser prófugo estaba casado.
Ahora estoy remal porque me invita a su boda que va a ser majestuosa y saben con quien? con Yavanovich el jugador de vóley, me quiero morir y yo que decía que era feucha.

MARISA ROMERO

1 comentario:

Anónimo dijo...

jaja Marisa eso sí es un final inesperado para vos y para las que lo leímos. soy de castelli, Gabi nos paso la dirección de ustedes y sin esperar más ingrese.